La inteligencia artificial

—Jacinto Yoder

El ser humano siempre ha sido innovador, y en estos últimos años no ha dejado de seguir conquistando el mundo. Ahora entran los datos digitales, los cuales han estallado en las últimas décadas. La cantidad de datos digitales disponibles hoy en día es gigantesca, y sigue duplicándose más o menos cada tres años.[1]

Las compañías que tienen estos datos en sus manos tienen mucho de qué sacarle provecho. Con los nuevos sistemas de inteligencia artificial se está logrando un mejor entendimiento en cuanto a la información del mundo. Los grandes centros de datos pueden leer, categorizar, entender, interpretar, extrapolar e incluso pronosticar los datos basado en lo que sucede en el mundo en tiempo real. Es aquí donde entran las compañías nacientes de la inteligencia artificial. 

Se nota la competencia entre las grandes potencias del mundo con sus sitios de video, por ejemplo, YouTube controlado por los Estados Unidos y TikTok por China. Ambas plataformas de video les dan a las grandes potencias mundiales datos que para ellos son muy útiles al entrenar la inteligencia artificial. Al analizar cada video de manera minuciosa, automática e instantánea, incluyendo el texto adjunto, la inteligencia avanza a pasos gigantescos. Se dice que hace unos años la inteligencia artificial se duplicaba durante meses. Ahora se calcula que se duplica en cuestión de horas de cada día. ¡Las supercomputadoras se están haciendo muy, muy potentes! 

Con una simple línea de texto enviada a estos modelos de inteligencia artificial, nos devuelven resultados de alta calidad, basado en lo que los humanos en conjunto han logrado entender a nivel mundial. A continuación, veamos algunos campos donde la IA es de utilidad al ser humano: 

• Transporte. Se ha estado trabajando arduamente en la producción de autos autónomos, que no necesitan de conductor. Cada vez hay más autos autónomos en las autopistas del mundo creando una base de datos que incluye cada tipo de suceso o problema que podría surgir en las carreteras del mundo. Al unir los datos de todos estos carros conectados, se pueden prevenir accidentes de manera asombrosa. Mucho más veloces que el cerebro humano, las computadoras pueden realizar maniobras incomprensibles para el hombre. 
• Medicina. En el caso del cáncer, un mal que ha plagado al mundo por mucho tiempo, la IA con sus tecnologías genómicas ha permitido que el científico descifre la composición nuclear de los cánceres. Con el tiempo, podrán entender mejor cada tipo de cáncer y con la misma tecnología hallar el tratamiento que mejor llegue a cada célula cancerosa, todo esto sin dañar las células buenas. 
• Artes. Con solo una línea de texto, puedes generar imágenes de situaciones imposibles de reproducir en vida real. La imaginación del hombre estalla al entender todas las combinaciones posibles. Puedes escribir: “genera una imagen de un gato vestido como un Amish, conduciendo un tractor, arando un campo de maíz”, y te sorprenderás del resultado. Ya están en el proceso de enseñarles a los algoritmos a producir video de la misma manera, y se espera que en cuestión de meses se logre producir contenido realista. 
• Lenguaje. Con el avance de la inteligencia artificial, se pueden transcribir y hasta traducir en tiempo real las palabras de un audio/video. Los traductores de texto han mejorado muchísimo. Con una entrada sencilla de cinco mil palabras en un idioma desconocido, los sitios traductores en un instante pueden devolverte una traducción muy legible, aunque todavía un tanto rígida, del tema a mano. Ahora la IA también te puede resumir instantáneamente libros enteros en pequeñas porciones, a tu antojo.  Con un solo clic, tu navegador puede traducir la gran mayoría de los sitios web del mundo, sin importar en qué país te encuentres. 

Lo cierto es que el hombre está al borde de eliminar la barrera de los idiomas que Dios creó en la torre de Babel. Ahora el ser humano está empeñado en unirse globalmente, y sus intereses no son benignos. Todavía hoy son verdaderas las palabras que dijo Dios en Génesis 11:6: “Todos forman un solo pueblo y hablan un solo idioma; esto es solo el comienzo de sus obras y todo lo que se propongan lo podrán lograr” (NVI, énfasis nuestro). La verdad es que estamos viendo resucitar el espíritu de Babel. “nos haremos famosos y evitaremos ser dispersados por toda la tierra” (Génesis 11:4 NVI). 

Sam Altman, líder de unas de las primeras compañías de la inteligencia artificial, dijo que mientras la IA aun necesite de los humanos, lo que nos debe preocupar es quién controla los comandos que se dan.[2]  O sea, el temor de este líder es que algún humano sin escrúpulos utilizará la inteligencia artificial en maneras muy destructivas. Con el récord criminal que tenemos como humanos, sabemos que solo es cuestión de tiempo, si no es que ya está sucediendo. 

Como cristianos que moramos en medio de esta cultura maligna, nos preocupa el futuro de nuestras iglesias y familias. ¡Hay tanta información e inteligencia digital, pero muy poca sabiduría de lo alto! Ojalá que los hombres que todavía valoran la imagen de Dios en sus vidas seamos fieles en mantenerla y no doblar la rodilla ante el dios de Babel: Baal-Zebub. 

Ya hemos leído cómo termina esta historia en Apocalipsis, y sabemos que el espíritu de Babilonia será del todo destruido al fin de los tiempos. La inteligencia artificial termina siendo sencillamente eso: “inteligencia artificial”. La sabiduría real viene de arriba, y no se consigue por medio de Google. En un mundo dirigido por el mal, los cristianos debemos resplandecer y mostrar que nuestra dirección proviene del “Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación”. La sabiduría de lo alto producirá vidas estables e íntegras en un mundo inestable y falaz. 

[1] https://www.statista.com/statistics/871513/worldwide-data-created/ 

[2] https://abcnews.go.com/Technology/openai-ceo-sam-altman-ai-reshape-soci…